Lo que sufre no forma parte de mí.

He adjurado de la verdad. Permítaseme ahora ser igualmente firme y adjurar de la falsedad. Lo que sufre no forma parte de mí. Yo no soy aquello que siente pesar. Lo que experimenta dolor no es sino una ilusión de mi mente. Lo aque muere en realidad nunca vivió, y sólo se burlaba de la verdad con respecto a mi mímo. Ahora ahdjuro de todo s los conceptos de mi mismo, y de los engaños y mentrias acerca del santo hijo de Dios. Ahora estoy listo para aceptarlo nuevamente como Dios lo creó y como aún es.

Padre mi viejo amor por Ti retorna, y me permite amar nuevamente a Tu Hijo. Padre, soy tal como Tú me creaste. Ahora recuerdo Tju Amor, así como el mio propio. Ahora comprendo que son uno.

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