Iniciación a los poderes psíquicos de los niños.
Atreviéndonos a ver las hadas y a sacarlas en fotos. Moviendo el fuego. Haciendo viajes a vidas pasadas rodeada del poder de los cristales. Saber lo que dicen los objetos de otras personas y los mensajes del alma para ellas, son entre otras cosas lo que se aprende allí.
Los hijos y los padres juegan a ser los seres que realmente son con todo su potencial.
Requisitos: ninguno
Fuente: Vianna Stibal